Los cambios hormonales, el embarazo, dietas, cepillarse demasiado o algunas enfermedades, pueden ser algunos motivos por los cuales tu cabello se cae, pero el síntoma más común que desata la caída del cabello, indudablemente es el estrés. ¿Es un mito o una realidad la relación entre el estrés y la caída del cabello? Vamos a ver. 

En promedio, todas las mujeres y los hombres, perdemos unos 100 cabellos al día. Puede sonar que son muchos, pero no es de alarmarse, es perfectamente normal. Pero si esta cifra crece significativamente durante mucho tiempo, se conoce como pérdida de cabello y es necesario que reflexionemos sobre cuáles son sus causas. 

¿Por qué el estrés causa la caída del cabello?

Al igual que el resto de nuestro organismo, nuestro cabello refleja todo lo que está pasando en nuestras vidas y nuestras emociones. Por lo tanto, si te encuentras bajo presión, o bajo un estrés significativo, tu cabello también sufre, pues pierde parte de su brillo, de su vitalidad y se vuelve quebradizo. 

También si te encuentras en un periodo de mala alimentación, desvelo o ansiedad, tu cabello sufre las consecuencias. Y si el estrés continúa durante mucho tiempo, tus hormonas no pueden regresar a sus niveles normales, lo que puede afectar tus folículos pilosos, impidiendo el crecimiento normal del cabello y causando caída; que puede presentarse en todas las zonas del cabello o en zonas circulares. Incluso esto puede pasar después de que el estrés finalice. 

Por esta razón, es bastante normal que veas que tu cabello se está cayendo un poco más por estos días de cuarentena, que el mundo se está enfrentando a una pandemia global y tú te estás enfrentando a un periodo de miedo y ansiedad.

¿Cuáles son los tipos de caída del cabello que pueden estar asociados con el estrés?

• Efluvio telogénico: es cuando un estrés significativo empuja grandes cantidades de folículos de cabello a una fase de descanso. Después de unos meses, el cabello puede caerse simplemente al peinarse o lavarse. 
• Alopecia areata: en una situación grave de estrés, el sistema inmunitario ataca los folículos capilares y esto causa la pérdida de cabellos. 
• Tricotilomanía: es un impulso irresistible de arrancarse el cabello del cuero cabelludo, las cejas y otras áreas del cuerpo. Esto puede ser una forma de enfrentar las sensaciones negativas o desagradables, como el estrés, la soledad, el aburrimiento, la tensión o la frustración. 

La pérdida repentina de cabello también puede indicar una enfermedad oculta que requiere tratamiento, por esta razón es importante que hables con tu médico si al peinarte o lavarte el cabello notas una pérdida irregular o fuera de lo normal. 

¿Si el estrés se reduce, se reduce también la caída del cabello?

El estrés y la caída de cabello no tienen que ser permanentes, pues si controlas el estrés muy probablemente tu cabello volverá a crecer. Por ello, es importante que aprendas a identificar qué es lo que te está causando estrés para tratar de evitarlo. 

¿Algunas claves? trata de llevar un estilo de vida saludable y duerme lo suficiente para que tu cuerpo pueda relajarse y recuperarse. Haz ejercicio, esto te ayuda a sacudirte un poco; pero si no te gusta mucho, el yoga siempre será una excelente opción para relajar tu cuerpo de manera natural y ayudar tus niveles de estrés.

Pero debes ser paciente, pues el ciclo de crecimiento del cabello es lento y pueden pasar algunos meses hasta que veas mejoras. Un truco es que mientras lavas tu cabello con champú realices un masaje capilar haciendo presión de manera circular en las raíces de tu cuero cabelludo. 

Otra muy buena opción, es enfocarte en fortalecer el cuero cabelludo de adentro hacia afuera con ingredientes naturales como el colágeno y la biotina. Estos ingredientes puedes encontrarlos en suplementos alimenticios y alimentos que ayudan a la producción de los mismos. 

Así con una alimentación saludable también podrás aportar para detener la caída del cabello, además de aportar brillo y suavidad, regenerando el cuero cabelludo y agregando fuerza. 

Algunos alimentos que te ayudarán a darle un golpe de producción de colágeno y biotina para tu cabello son:

• Frutas y verduras rojas (tomate, cerezas, frambuesas, fresas, etc)
• Yema de huevo
• Alimentos ricos en azufre (aceitunas, pepinos, apio, nueces, cebollas)
• Leche de soya

Tú solo respira y mantente saludable, ya verás como lograrás romper la relación entre el estrés y la caída del cabello.